lunes, 28 de noviembre de 2011

Domingo 20 de Noviembre. ALIMENTACION CONFORME A LA PALABRA.



LECTURAS: HECHOS 10:1-48; DEUTERONOMIO 14:13-21.










NOTAS, COMENTARIOS Y REFLEXIONES:





Independientemente de la alimentación que llevamos hoy en día, de la cual por costumbre hemos aprendido, nuestro mejor alimento debería ser el alimento para el alma que es la palabra de Dios; si leemos la palabra de Dios y la ponemos en practica, es lógico que recibiremos un beneficio para nuestro ser: mente, cuerpo, corazón y alma. El llevar a cabo la aplicación de la palabra de Dios en nuestra vida es como si digerimos el alimento que comemos, el beneficio en nuestro cuerpo se dará por la sencilla razón de que Dios quiere lo mejor para nosotros, y quien mejor que el que creo todas las cosas para saber cuales alimentos son un perjuicio para nosotros, de todos modos si pensamos al final cuando está uno enfermo ¿qué es lo primero que le quitan a uno los médicos?, recordemos, carne de puerco, mariscos, principalmente, porque no inciar con una alimentación sana para enfermar menos y sanar lo que está mal; la prohibición de los animales impuros es una cuestión de salud, no de prohibir por prohibir, pero aún así hermano tu tienes la última palabra ¿deseas no comer ciertos alimentos ahora, por obediencia y salud? o después por enfermedad y orden médica. Estos son alimentos biblicos pero y ¿que de aquellos que igual nos hacen mal a nuestro cuerpo? Como la chatarra, los referescos, los dulces, etc. hay que ver por nuestra salud de cuerpo y alma, y no por nuestra satisfacción corporal de un rato y que a la larga nos va a llevar a insatisfacciones permanentes por la enfermedad. Para qeu hecharle mas veneno a nuestro cuerpo.





DEBEMOS VIVIR CONFORME A LA PALABRA DE DIOS, CRISTIANO QUE LEE Y VIVE LA PALABRA DE DIOS SE MANTIENE EN BENDICION. NO HACER ACEPCION DE PERSONAS. Sabemos que Dios ama a todo el mundo y que Jesús murió por todos. Pero, ¿será que inconscientemente cerramos nuestro corazón a quienes son diferentes? Si los creyentes que habían estado con Jesús y lo vieron después de su resurrección tenían problemas con el prejuicio, no debemos pensar que nosotros no los tenemos. La salvación no quita automáticamente todas nuestras ideas del pasado. Es posible que desde nuestra niñez alguien nos haya llenado la cabeza con ideas acerca de ciertas personas que nos hagan aislarnos de ellas. Este era el caso con los judíos, aun con los que se convirtieron en discípulos de Jesús. Los prejuicios hacia los gentiles amenazaban el alcance evangelístico de la Iglesia Primitiva.
Podemos estar agradecidos porque una vez que el Señor le mostró a Pedro dónde estaba equivocado, éste pronto cambió su actitud, aun a riesgo de ser criticado por sus más íntimos amigos. ¿Puede el temor de lo que opinan otros hacer que no estemos dispuestos a alcanzar a todos con el evangelio?
Cuando Pedro quedó libre de sus prejuicios, debe de haber sentido que se deshacía de un gran peso. Quizá sea difícil reconocerlo, pero los prejuicios pueden ser una carga pesada. Si nos impiden testificar de Cristo, se vuelven un problema serio. Nuestro deseo es que Dios abra la puerta de nuestro corazón así como lo hizo con Pedro cuando éste reconoció que Dios ama a la gente de toda raza y cultura aun si es diferente a la nuestra. En nuestros barrios hay oportunidades para alcanzar a los que necesitan a Cristo aun si son diferentes.





TIENES QUE BUSCAR A DIOS PARA BENDECIR NO SOLO PARA PEDIR. UNA PERSONA EN ESPIRITU Y EN VERDAD TESTIFICA QUE DIOS ESTA VIVO; EL EVANGELIO ES VIDA, VIVIFICA, SINO SOMOS OBEDIENTES COMO PODEMOS EVANGELIZAR?.´POR MEDIO DE LA OBEDIENCIA EL ESPIRITU SANTO HABLA Y ACTUA POR NOSOTROS SOBRE LOS PAGANOS. ¿COMO SOMOS CON LOS HIJOS, CON LOS VECINOS, EN EL TRABAJO? UN CRISTIANO SE QUEDA CON CRISTO EN CUALQUIER LUGAR.





LOS CATOLICOS, LOS PAGANOS, LOS SECTARIOS, DEBEN DE VER EN NOSOTROS QUE SOMOS CRISTIANOS, HAGA LAS COSAS POR DIOS NO POR LOS HOMBRES; TODO ES SENCILLO, NOSOTROS NOS COMPLICAMOS PORQUE PERMITIMOS QUE LA SOCIEDAD NOS ARREGLE NUESTRA VIDA A LO QUE LA DEMAS GENTE QUIERE Y NO A LO QUE DIOS NOS MUESTRA.










¡AMEN Y GLORIA A DIOS!















*Notas, comentarios y reflexiones por el colaborador Oscar Rivera.

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